Salto al vacío del destino persiguiendo a la escurridiza mariposa del amor, dejo atrás la seguridad de la tierra firme de mi pasado, basándome en la vaga esperanza de tu mirada.
Como un suicida sin alas, empeño mi existencia a tu gratitud, a tu corazón, a tu espíritu, a tus sentimientos. Salto sin mirar atrás y sin mirar hacia delante, cayendo con rapidez a través de las nubes de mis temores y dudas. Sostengo la respiración aguardando el regalo sublime de tu presencia, la sonrisa que me de paz, la mirada que me abstiene de creer y me impulsa a soñar.
Admito que necesite valor y locura para saltar, pero fue el lejano aroma de tu presencia que me impulso. No miro hacia adelante, no espero paisajes llenos de color, de montañas y valles, solo deseo que el cariño tuyo me regale las alas, para dejar de caer….. y volar contigo y para ti.
Solo espero que la verdad de ti, de tus sentimientos, de tu alma me llene de cariño y me impulse a sitios desconocidos pero tan bellos como tu…. Solo…. No me dejes caer…. Sea por tus ojos, boca o mano…. Demuéstrame el regalo infinito… que es tu amor.
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